¿Ganas de sentirte liberada?
Cambia tus patrones emocionales para sacar el máximo a los instantes wow de tu vida.
Te acompaño a transformar tus recursos internos en herramientas que te hagan llegar a una vida plena, aunque ahora creas que no eres capaz de solucionar tu malestar emocional.
Tu realidad no te permite estar bien.
Vives en un continuo proceso de búsqueda. Ansías tu remanso de paz, pero es imposible encontrarlo… y mira que lo has intentado.
Rabia, tristeza o ansiedad sin conocer la manera de romper el bucle.
Por eso, el desgaste en el empeño todavía te hace sentir peor: llega la impotencia.
Ni tú misma sabes lo que te pasa.
Siempre habías creído que no le pedías mucho a la vida, pero ¿qué menos que vivir sin este desasosiego?
Puedo ayudarte a encontrar el equilibrio que deseas, liberándote de los nudos emocionales que no te dejan disfrutar de los momentos más felices de tu vida.
He tenido y tengo una vida como la tuya: infancia feliz, adolescencia movidita y juventud de aprendizaje. Aquí sigo
He sentido muchas veces eso de «¿Y esto es todo?», … de hecho, en alguna ocasión, aún lo siento.
Llega un momento cada cierto tiempo que me empiezo a replantear si lo que hago es lo que quiero, si podría estar haciendo más, si soy feliz y si no lo soy, qué pienso hacer yo para cambiarlo.
A veces, me invade la frustración, la tristeza y el cabreo más intenso porque no soy los demás. Así de simple.
Me comparo inconscientemente, me pongo a darle vueltas a lo que no estoy haciendo, a lo que no estoy dedicando mi tiempo … me pongo en el NO, en vez de en el SÍ.
Llevo tanto tiempo inmersa en el desarrollo personal, aprendiendo y acompañando a las personas que cuando pasa esto salta en mí un resorte. Yo lo llamo «parada de reflexión»
ASÍ identifico unos cuantos nudos que se me han quedado atorados …
y Me pongo manos a la obra.
Así que sé por dónde tirar, de qué hilo, con qué fuerza y de qué manera.
Y eso solo lo da la experiencia de muchos años entendiendo que nuestra mente es nuestra mejor aliada. Y también nuestro peor obstáculo.
Por eso, entenderás la importancia de conocerla y darle nuevos recursos para hacer de tu vida un camino que te apetezca transitar.
Yo no he vivido un gran evento que me haya hecho transformarme. No tengo una historia grandilocuente con la que se te erice la piel al leerla.
Yo soy esta. Con miedos, con remiendos y con un calor interno que hace que permanezca en mí, tras más de 10 años de experiencia, el deseo de transformar la vida de los demás como hago yo con la mía cada día.
La suma de mis conocimientos y haber experimentado un crecimiento parecido al que estás buscando tú, potencia los resultados en muy poco tiempo.
Mi formación en Coaching e Inteligencia Emocional, la experiencia profesional como consultora de RRHH, coach y formadora, y por supuesto, años currando duro, me han hecho comprender la importancia de estar en continuo reciclaje.
Aprender, formarme, ponerlo en práctica: un ciclo que me encanta.
Tengo la mente abierta, y siempre busco la libertad de ser y de pensar.
No creo tener grandes manías, pero sí, pasión por mi familia y por vivir, sentir, crecer, compartir, volar… adoro emocionarme.
Me conmueve la naturaleza, el aire fresco, bailar, hacer reír a mi hija, la música que te toca el corazón, las historias que cuentan algo que te eriza la piel, comer y beber con mi marido, los abrazos, los orgasmos, las sacudidas mentales y el calor del sol en la cara.
Ser madre me ha enseñado mi propia esencia, multiplicada por mil. Tú sola, dando mucho más de lo que nunca imaginaste, dejándote el alma y el cuerpo todos los días.
Pienso que la escucha activa y el haber llegado a tener las cosas claras me facilita entrar en conexión con las personas y que la empatía sea total a la hora de trabajar conmigo.
Si te interesa conocer más de mí puedes llamarme y si lo que quieres es ver mi trayectoria profesional puedes consultar mi “Linkedin”
Tssssss!!!! No siempre hablo tanto, aunque no lo creas he sido capaz de irme a un pueblo perdido a meditar 10 días en silencio. Una experiencia más que recomendable si quieres crecer.
Sé lo difícil que es cambiar algo que llevas siendo toda tu vida.
El miedo que sientes para dar ese paso.
Conozco el nudo que se forma en tu garganta, en el corazón, o en las tripas, porque he estado allí.
Tienes la valentía de reconocerlo, por eso te admiro. Y juntas vamos a deshacerlo. Para que vivas como tú quieras vivir.
Puedes contactar conmigo o puedes seguir haciendo lo que has hecho hasta ahora para cambiar: nada.
No sé si te has dado cuenta de que, pese a lo que dice un dicho popular, el tiempo no lo cura todo. A veces, incluso agrava los problemas.
Eso es precisamente lo que te impide pasar a la acción: ¡piensas que no tienes tiempo de detenerte a resolver lo que no funciona! … Llevas una vida taaaaan ocupada.
¿No crees que te mereces esa hora para intentarlo?
Contacta conmigo y deja que te oriente. Juntas conseguiremos el cambio.